Tener un “Negocio Verde” o “Eco-Amigable” se ha convertido en más que una simple tendencia para los dueños de negocios que gastan sus recursos en la búsqueda de hacer sus empresas más ecológicas y eficientes, ya que ven en esto los múltiples beneficios que les aportará.
Ahora, si has estado buscando la forma de contribuir con nuestro planeta, la sociedad y garantizar el crecimiento de tu empresa a largo plazo, entonces quédate y sigue leyendo.
Te explicaremos cómo alcanzar la sustentabilidad de tu empresa.
Pero no sin antes hacer mención de la «Huella de Carbono».
Esta métrica, que mide las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) generadas por una empresa, se ha convertido en un indicador clave de la sostenibilidad y responsabilidad ambiental.
La huella de carbono es la suma total de GEI emitidos directa o indirectamente por una empresa, producto, servicio o individuo.
Estos gases, como el dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4) y el óxido nitroso (N2O), actúan como una manta que atrapa el calor en la atmósfera, provocando el calentamiento global y el cambio climático.
Existen diversos tipos de huella de carbono, cada uno con un enfoque particular:
En el actual panorama empresarial, la medición de la huella de carbono se ha convertido en una necesidad imperante para las empresas de todos los sectores.
Ya no es suficiente con tener buenas intenciones; los consumidores, inversores y reguladores exigen datos concretos que demuestren el compromiso de las empresas con la sostenibilidad ambiental.
Medir la huella de carbono permite a las empresas identificar las principales fuentes de emisiones de GEI (lo que es fundamental para desarrollar estrategias de reducción efectivas y priorizar las acciones con mayor impacto), así como a cumplir con las normativas ambientales.
Cada vez más países implementan regulaciones que exigen a las empresas medir y reportar sus emisiones de GEI.
En España, por ejemplo, la Ley de Cambio Climático y Transición Energética establece objetivos ambiciosos para la descarbonización de la economía.
Para garantizar la comparabilidad y la credibilidad de las mediciones de la huella de carbono, existen diversas normas y estándares internacionales:
Las empresas pueden optar por implementar estas normas de forma voluntaria o como parte de un programa de certificación de sostenibilidad.
La certificación por una entidad independiente proporciona una mayor confianza a los stakeholders y demuestra el compromiso de la empresa con la mejora continua.
Las emisiones de GEI provienen de diversas fuentes, y es importante comprender dónde se generan para abordar eficazmente la reducción de la huella de carbono.
Algunas de las principales fuentes de emisión de huella de carbono, son:
Existen diversas herramientas disponibles para ayudar a las empresas a medir su huella de carbono.
La elección de la herramienta dependerá del tamaño de la empresa, sus necesidades y su presupuesto.
Herramientas para la Medición de la Huella de Carbono:
Reducir nuestra huella de carbono no es una tarea imposible, y cada uno de nosotros puede marcar la diferencia mediante acciones sencillas pero significativas.
a) Consumo Responsable: Optar por un consumo responsable implica elegir productos y servicios más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente. Priorizar los productos locales y de temporada, reducir el consumo de carne y elegir opciones de transporte sostenibles son formas efectivas de reducir nuestra huella personal.
b) Eficiencia Energética: Mejorar la eficiencia energética en nuestros hogares y lugares de trabajo puede ayudar a reducir significativamente el consumo de energía y, por lo tanto, las emisiones de GEI. Desde la elección de electrodomésticos de bajo consumo hasta la regulación adecuada de la calefacción y el aire acondicionado, pequeños cambios pueden marcar una gran diferencia.
c) Movilidad Sostenible: Optar por formas de transporte más sostenibles, como caminar, usar bicicletas o utilizar el transporte público, puede ayudar a reducir las emisiones asociadas con el transporte individual.
d) Energías Renovables: La transición hacia fuentes de energía 100% renovables es esencial para reducir nuestra huella de carbono. Tanto a nivel personal como corporativo, invertir en energía solar, eólica y otras formas de energía limpia es una estrategia efectiva para la reducción de emisiones.
e) Gestión de Residuos: La correcta gestión de residuos, incluido el reciclaje y la reutilización, puede reducir la cantidad de desperdicios enviados a los vertederos y, por lo tanto, las emisiones de GEI asociadas con la descomposición de residuos.
Ahora si… Sin más, revisemos el concepto general de lo que es un «Negocio Verde», Sostenible o Sustentable.
Un negocio verde, sostenible o sustentable es cualquier tipo de organización que participe en actividades ecológicas o eco-amigables para asegurar que los productos y procesos se alineen a la búsqueda de la solución para los problemas actuales del medioambiente mientras se mantienen los ingresos.
La verdad es que aunque el 90% de los dueños de empresas piensan que la “sustentabilidad es de suma importancia”, solo el 60% lo aplica. Con frecuencia, los negocios que hablan de ser ‘Verdes’ carecen de su verdadera implementación.
Lo más probable es que esto esté pasando porque los directores ejecutivos y los directores corporativos no están tan comprometidos con el medioambiente como hacen ver.
Pero cada vez más corporaciones entienden el mensaje y se puede notar en el aumento en el rol del Director de sostenibilidad o Chief Sustainability Officer (CSO).Con esto también ha aumentado el número de Organizaciones Comunitarias Sostenibles
En el entorno empresarial actual, la sustentabilidad, tanto económica, social como la del medio ambiente, tienen múltiples beneficios, una buena estrategia de sostenibilidad agrega sin duda un gran valor a la marca, satisface a los consumidores, crea nuevas oportunidades y sobre todo aumenta la eficiencia.
¿La mejor parte? No tienes que ser una gran empresa para tomar medidas sostenibles y contribuir con la recuperación de nuestro planeta a la vez que te beneficias de todo lo mencionado abajo.
Hay estudios que avalan la existencia de una muy buena relación entre el desempeño ambiental y el económico, aquí te mencionaremos algunos puntos:
Y como mencionamos al principio, la sustentabilidad de las empresas ecológicas se podría definir como el apego a las necesidades medioambientales actuales.
Dicha sostenibilidad tiene tres pilares: económico, ambiental y social:
Cuando pienses en hacer que tu empresa sea ecológica, es bueno que tengas un poco de inspiración a la mano.
Aquí te traemos una lista de empresas que han hecho que la ecología pase a otro nivel.
Holaluz: Esta compañía de energía renovable ofrece a sus clientes energía 100% verde y promueve la autogeneración a través de paneles solares.
Estos son solo algunos ejemplos de las muchas empresas que están demostrando que es posible tener éxito al mismo tiempo que se cuida el planeta y se mejora la vida de las personas.
Y ahora, ¿cómo planeas transformar la tuya en una de estas?
Ya dijimos que implementar prácticas ecológicas podrá afectar positivamente el resultado financiero de tu organización, así parezca un gran desafío al principio.
Sin embargo, es posible que tanto empleados como consumidores se acoplan fácilmente a las estrategias ecológicas, durante la conciencia actual.
Así que aquí te pondremos 7 prácticas para hacer tu negocio más ‘Verde’
Esto depende de la naturaleza de tu negocio, pero si existe la posibilidad, podrías ofrecerles a tus empleados la flexibilidad de trabajar desde casa al menos un día a la semana.
Tanto si es posible o no la opción anterior, también puedes considerar cambiar la forma en la que tu y tus empleados llegan al trabajo. Puede que no lo sepas, pero probablemente existan soluciones más amistosas para tu bolsillo y el medioambiente.
La tecnología es nuestro mejor aliado si de reducir desperdicios se trata. La digitalización de documentos es la alternativa más común para reducir el desperdicio de papel.
Así, incluso ahorrarás tiempo, dinero y mucho espacio, haciendo que la organización y transferencia de información sea más sencilla.
Los dispensadores de vasos de plástico y las toallas de papel en los baños no son nada ecológicas, así que podrías reemplazarlas por productos eco-amigables o al menos reducir su uso. Por supuesto, esto aplica para cualquier otro tipo de producto de un sólo uso.
¿Es imposible quitar por completo el papel, los vasos de plástico y productos similares?
Al menos puedes asegurarte de que tu negocio fomenta la sustentabilidad con instalaciones de reciclaje a las que sea fácil acceder. Así sea algo tan básico como contenedores separados.
Opta por cambiar los productos de higiene convencionales por productos ecológicos. Entre estos se destacan los productos de limpieza. Aunque algunos no puedan ser reemplazados, otros como los jabones cosméticos en áreas comunes (por otros que no estén hechos a base de animales) si que se pueden cambiar.
Sabemos que puede parecer más conveniente los bajos precios de proveedores de grandes cadenas, pero sí establecer buenas relaciones con los proveedores locales incluso podrías conseguir buenos descuentos, a la vez que contribuyes con la disminución del CEO2 y de igual forma, con la comunidad local.
¡Recuerda! No importa si tu empresa es pequeña, mediana o grande.
El más mínimo cambio ecológico, por más insignificante que parezca, brindará grandes beneficios al medio ambiente y a la felicidad general de tus clientes.
Desde Meetwork, te recomendamos que no esperes a que sea demasiado tarde.
